sábado, 12 de mayo de 2012

El tigre y el león


Rufo
Erase una vez una familia de leones que se escondían de una familia de tigres porque querían pelearse. Un día en la selva había una presa y se pelearon por ella, hasta que llegó un buitre y se lo llevó.


Un día, en la familia de los leones, nació un cachorrito. Lo  llamaron Rufo. Rufo era muy valiente, ágil igual que su padre y fuerte igual que su madre.

Kim
Pero al día siguiente nació nació un tigre llamado Kim
Muy juguetón, cariñoso y muy feroz.


Un día se fue Rufo a buscar comida lejos de su familia, y Kim también salió a cazar.
Kim y Rufo jugando

En su camino se cruzaron, y como estaban aburridos se pusieron a jugar juntos. Jugaron al escondite, a pelear ...
Las madres ya preocupadas porque tardaban, fueron en su búsqueda. Tras un largo paseo vieron a sus hijos jugando con su peor enemigo.
Esta es la madre de Kim  


Pero las madres se hicieron amigas porque vieron que no había que tener en cuenta lo pasado. Pero papá león y papá tigre se fueron a ver porque no venían sus mujeres y sus hijos. Cuando llegaron a donde ellos estaban los encontraron jugando y hablando entre ellos. Así que decidieron olvidar el pasado y ellos  se pusieron a hablar. Cuando calló la noche cada uno se fueron a su casa.
Pero al día siguiente  empezó a llover, ni Kim ni Rufo salieron a la selva a jugar. Kim estaba aburrido y Rufo también. Mientras los padres de Kim hablaban, él escapó de casa. Pero no sabía ir a casa de su amigo así que se volvió a casa, pero cuando llegó a su hogar estaban las puertas y ventanas cerradas. Como vió a su padre buscándolo desesperado, corrió a su lado y no se volvió a separar de él.
Fueron a buscar comida, luego a casa de Rufo y después regresaron a su casa.

Y, colorín colorado, este cuento se ha acabado...

FIN

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